Change language

jueves, 6 de noviembre de 2014

El aletargo

No vas a venir, y sin embargo te espero
¿Por qué tengo la certeza,
la seguridad, la entereza,
de que no vas a llegar?
Nadie me lo dijo 
Sólo una pena quiero alargar
atarme a la esperanza elijo
como un barco suelto en el mar.

Tu contorno ya es sombra
lúgubre recuerdo del adiós
y yo con mi vida que sobra,
soy existencia que abandonó Dios.

Tu sonrisa sigue presentándose
tan pura, cálida y despreocupada,
tu alma llena de gozo, dándose 
a la vida, como a la vaina la espada.

Y tu recuerdo me castiga
hermosas visiones con que me hostiga.


No hay comentarios:

Publicar un comentario